Este sencillo, al igual que "Odio", fue autoproducido e integra una predominante melodía compuesta por capas de voces al unísono que se van descomponiendo para manifestarnos parte de la identidad del músico, quien ha declarado que su quehacer creativo está ligado a un proceso íntimo de canalización de emociones e infortunios, y que en cada canción nos invita a descomponer estas inquietudes y a convertir la pena en arte.Proyecto electropop de Bruno Lazarte que lo trae de regreso al mundo de la música esta vez de la mano de Sello Trigal.